Una firma certificada por el sello o timbre de un notario público es una “poderosa herramienta de gestión de riesgo para prevenir el fraude y el robo de identidad”, agrega.
Un notario público actúa como testigo independiente no sólo de la firma de un documento, sino también del hecho de que todas las partes firmaron voluntariamente y por sus propios medios.

Nuestro trabajo es profesional, serio, calificado y apegado siempre a derecho.